¿Qué hacer si mi pareja no quiere divorciarse?

¿Quieres divorciarte, pero tu pareja no está de acuerdo? Esta es una situación más común de lo que parece, y la buena noticia es que, en España, no necesitas el consentimiento de la otra persona para iniciar el proceso de divorcio. Desde 2005, nuestra legislación permite que uno de los cónyuges solicite el divorcio de manera unilateral.

¿Cómo funciona? Aquí te lo explicamos paso a paso.

¿Es posible divorciarse si mi pareja no quiere?

SÍ, es posible. Aunque tu pareja no quiera firmar o no esté de acuerdo, tienes derecho a divorciarte. Antes de 2005, las cosas eran diferentes: necesitabas justificar el divorcio con causas como infidelidad o abandono del hogar. Hoy en día, basta con tu decisión de poner fin al matrimonio. El consentimiento de la otra parte ya no es un requisito.

¿Qué necesitas para iniciar el divorcio?

Para empezar el proceso, necesitarás cumplir algunos requisitos básicos:

• Tres meses de matrimonio: Este es el tiempo mínimo que debe haber transcurrido, salvo en casos excepcionales (como maltrato).
  
• Documentación necesaria: Tendrás que presentar el certificado de matrimonio y, si tienes hijos, los certificados de nacimiento.
  
• Asesoramiento legal: Contar con un abogado con experiencia en este tipo de casos de divorcios y separaciones es obligatorio para iniciar el proceso.

Con estos tres requisitos cumplidos, ya puedes dar el primer paso.

¿Cómo funciona el divorcio sin acuerdo?

Cuando tu pareja no quiere colaborar, el camino es el divorcio contencioso. En este tipo de divorcio, será el juez quien tome las decisiones sobre temas importantes, como:

• La custodia de los hijos.
  
• El uso de la vivienda familiar.
  
• La pensión alimenticia o compensatoria.
  
• La división de bienes.

Es un proceso más largo que un divorcio de mutuo acuerdo, pero tiene la ventaja de que el desacuerdo de tu pareja no lo detendrá.
Aunque en nuestra web puedes encontrar un contenido exclusivo tratando sobre este tipo de divorcio, el contencioso, te dejamos un resumen principal sobre los pasos que requiere poner en marcha este tipo de divorcio.

Pasos del divorcio contencioso

• Presentación de la demanda: Tu abogado redactará la demanda de divorcio y la presentará en el juzgado correspondiente.

• Medidas provisionales (opcional): Puedes solicitar al juez que tome decisiones temporales sobre custodia, vivienda o pensiones mientras se tramita el divorcio.

• Comparecencia en el juzgado: El juez citará a ambas partes para intentar llegar a un acuerdo. Si no es posible, el juez dictará una sentencia con las medidas definitivas.

Aunque puede parecer complicado, un buen abogado se encargará de guiarte en cada paso del camino.

¿Qué pasa si mi pareja se niega a firmar el divorcio?

Si tu pareja se niega a colaborar o incluso evita recibir las notificaciones judiciales, el proceso sigue adelante. Estas son las soluciones más habituales en estos casos:

• Notificación por edictos: Si tu pareja no se deja notificar, el juzgado puede publicar la notificación en el Boletín Oficial del Estado (BOE). Esto garantiza que el proceso avance.
  
• Resolución en rebeldía: Si tu pareja no comparece en el juzgado, el juez puede dictar sentencia aunque no esté presente.
  
• Decisión del juez: El divorcio se decreta sin importar que la otra parte no firme o no coopere.

No necesitas la aprobación de tu pareja para recuperar tu libertad.

Medidas provisionales si no hay acuerdo para el divorcio

El divorcio contencioso puede tardar varios meses, y mientras tanto, tu vida no puede quedarse en pausa. Por eso existen las medidas provisionales, que son decisiones temporales del juez para organizar aspectos urgentes del matrimonio. Estas medidas te ofrecen estabilidad mientras se resuelve el divorcio.

Si tienes hijos, el juez puede establecer un régimen de custodia o visitas mientras se dicta la sentencia final.
Puede decidir quién se queda en la vivienda familiar y cómo se gestionan los gastos del hogar.
Si hay necesidad económica, puede ordenar el pago de una pensión alimenticia o compensatoria.

Problemas frecuentes y cómo solucionarlos en esta situación

En nuestra experiencia como abogados, hemos visto varios problemas comunes en este tipo de divorcios. Aquí te dejamos algunos ejemplos y sus soluciones:

1. Mi pareja pone excusas para retrasar el proceso.
   No te preocupes. Aunque tu pareja haga todo lo posible por alargar el procedimiento, el juez está obligado a seguir adelante y dictar una resolución.
   
2. No nos ponemos de acuerdo sobre la custodia o los bienes.
   En estos casos, será el juez quien decida. Sus decisiones se basarán en criterios objetivos, como el interés superior de los hijos o la equidad en la división de bienes.
   
3. No puedo pagar un abogado.
   Si tienes dificultades económicas, puedes solicitar justicia gratuita. Esto te permitirá acceder a un abogado y procurador sin coste alguno.

Conclusión: No tienes que quedarte atrapado en una situación que no deseas

Si tu pareja no quiere divorciarse, es importante que sepas que tienes opciones para seguir adelante. La ley te permite tomar el control de la situación y solicitar el divorcio, incluso sin su consentimiento. Puede ser un proceso algo más largo, pero con el apoyo adecuado, es perfectamente posible lograrlo.

En nuestro despacho de abogados, entendemos que cada caso es único y sabemos cómo manejar este tipo de situaciones con firmeza y empatía. Estamos aquí para ayudarte a resolver tus dudas, proteger tus derechos y acompañarte en cada paso del proceso.

Si necesitas orientación o quieres comenzar cuanto antes, ponte en contacto con nosotros. Resolveremos todas tus inquietudes y nos encargaremos de que avances hacia una nueva etapa en tu vida. Tú decides cuándo empieza este cambio, y nosotros te ayudamos a hacerlo posible.